En numerosas ocasiones hemos destacado cómo cuidar ciertos aspectos básicos de la vida diaria puede favorecer tu estudio. El ejercicio, el descanso y el ocio son algunos de estos aspectos, y en este artículo queremos hablarte de uno sumamente importante: la alimentación.
Cómo impulsar tu estudio con la alimentación
Algo que te ayudará a mejorar tus niveles de bienestar será mantener un control sobre tu comida. No se trata de hacer dieta o ser muy rígido, pero sí que debes tener en cuenta que hacer comidas excesivas te hará sentir pesado y aletargado, lo que entorpecerá tu estudio. Abusar de la sal, el azúcar, alimentos preparados, fritos, bebidas alcohólicas etc., te pasará factura. Puede que pienses que es exagerado, pero solo tienes que hacer la prueba. Un día, come sin prestar atención a nada: ingredientes, cantidades, horas de ingesta, cantidad de ingestas diarias… y observa cómo te sientes y cómo es tu estudio durante ese día y la mañana siguiente. Otro día, elige alimentos ligeros y sanos, dentro de tus preferidos. Come todo lo que necesites, pero trata de no comer si no tienes hambre. Bebe suficiente agua, come solo en los momentos en que lo necesites y no demasiado tarde por la noche. Verás la gran diferencia de bienestar que sientes y cómo incide en tu rendimiento.
Alimentos que te ayudarán
Si quieres potenciar tu estudio, además de seguir los anteriores consejos, estos alimentos pueden ayudarte:
- Aguacate: esta fruta tan versátil posee grasas monoinsaturadas (grasas buenas). Te ayudará a mejorar las conexiones sinápticas de tus neuronas y puedes incluirlo fácilmente en tu alimentación en ensaladas, tostadas y hasta postres.
- Nueces: este delicioso fruto seco incluye antioxidantes, grasas omega 3, melatonina, vitamina E y ácido fólico. Protege la función cerebral, tu memoria y mejora tu descanso.
- Plátano: es ideal para tu salud cerebral, potenciar tu memoria y tu concentración gracias a su contenido en magnesio, potasio y diversas vitaminas. Entre estas destaca la B6, que favorece que produzcas naturalmente dopamina, serotonina y norepirefrina. Se trata de neurotransmisores que favorecen la concentración.
- Verduras de hoja verde: cuanto más oscuro el verde, mejor. Haz mezclas en tus ensaladas para conseguir todos sus antioxidantes y vitaminas A, C y E, ideales para mantener tus funciones cerebrales y la atención.
- Té: es necesario que te mantengas hidratado para rendir intelectualmente. Puedes completar tu ingesta de agua con té. El té posee L-theanina, que mejora la memoria, el tiempo de reacción y el sentido de alerta.
Existen otros alimentos que pueden ayudarte, pero hemos querido darte una pequeña lista de los más importantes que, además, son muy fáciles de incorporar a tu alimentación. Si te fijas, simplemente con prepararte una gran ensalada de varias hojas verdes, aguacate y nueces ya tienes un buen potenciador. Si tomas plátano de postre o en desayuno o merienda, junto con un té, ya lo tienes hecho.
En caso de que estudies fuera de casa, además, es muy sencillo llevar un termo con té y un puñado de nueces y un plátano. Te recomendamos que investigues algunos alimentos más que puedan servirte, como la zanahoria, la levadura de cerveza o los pistachos.