Tal y como te decíamos en nuestro post de ayer, es posible que, al decidir estudiar las oposiciones de Correos, no fueses consciente de que iba a aumentar el número de horas que pasas sentado. Demasiadas horas sentado te pueden pasar factura más tarde o más temprano, así que es necesario que cuides este aspecto. Sigue leyendo para conocer cómo cuidar tu cuerpo mientras estudias.
¿Cómo y cuánto sentarse?
Demasiadas horas sentados leyendo, escribiendo o usando el ordenador causan estragos en nuestras muñecas, hombros, cuello y espalda, en general. La recomendación es la de mantener una buena postura en el asiento y levantarse de este con frecuencia para caminar y estirarse un poco. Una proporción buena sería la de estar levantados 5 minutos cada hora, y sentados estudiando los 55 minutos que faltan. No obstante, hay algunas técnicas, como la técnica Pomodoro, que se centran en la productividad y reducen el tiempo de estudio a 25 minutos y 5 de descanso. Adáptalo a tus necesidades, pero levántate del asiento, camina y estírate.
Foto de Alena Shekhovtcova en Pexels
Sobre sentarse correctamente, ¿cómo se hace? Fíjate en lo siguiente:
- Mantén tu espalda pegada al respaldo de tu silla. No obstante, también puedes separarla un poco para estar más derecho y activo. Te recomendamos alternar ambas.
- Prueba a utilizar un reposapiés. Es muy posible que te ayude a descargar la espalda.
- Procura que tus pies siempre estén tocando el suelo (o el reposapiés) y tus rodillas estén en el mismo nivel de las caderas o levemente por encima, pero nunca por debajo.
- Intenta no cruzar las piernas, para no entorpecer la circulación sanguínea ni tener distinta presión sobre cada glúteo.
- Fíjate en que por lo menos dos terceras partes de tus muslos estén en contacto con el asiento.
- Te recomendamos que tus hombros estén sueltos, relajados, y no en tensión mientras estudia. Visualiza cómo tus orejas y tus hombros se separan el máximo posible.
- Mantén muñecas y antebrazos rectos a ambos lados de tu cuerpo.
- Ten la cabeza recta. Sabemos que es tentador, cuando estamos cansados, dejar caer la cabeza. Sin embargo, adelantar la cabeza hace más presión sobre tu zona cervical.
- Además de lo anterior, te será útil hacer ejercicios de estiramiento en el cuello y los hombros.
Sobre la silla de estudio, en el post de ayer ya te dimos toda la información, de modo que, si no lo leíste, aquí te dejamos el enlace para que puedas ir a consultarlo.
¿Y si usas ordenador?
Si utilizas el ordenador en ciertos momentos de tu estudio, ten presentes algunos consejos:
- Trata de tener el ordenador justo delante de ti. En caso de no poder tenerlo delante y colocarlo en un lado de la mesa, intenta girarte al completo y no hacer una torsión de la columna.
- Debes tener el teclado situado a una distancia que te permita apoyar los antebrazos de manera cómoda. Además, debe estar a una altura que te permita tener los hombros relajados y no levantados en tensión.
- Fíjate en que la parte superior de la pantalla quede a la altura de tus ojos para evitar tensiones en la zona cervical o dorsal. Procura, además, que haya como mínimo 40 cm entre tus ojos y la pantalla.
- Por último, recuerda que no te refleje en la pantalla la luz del exterior y utiliza para estudiar una luz ni demasiado blanca ni demasiado amarilla. Existen algunos flexos regulables en intensidad y tipo de luz que te vendrán genial.
Como has podido comprobar, sentarse a estudiar conlleva tener presentes varios aspectos. No son complicados ni demasiados, pero sí muy importantes para tu bienestar. ¡Tenlos en cuenta y mejora tu estudio!