Para trabajar en Correos, necesitas aprender ciertas habilidades, denominadas “duras”, que son las relativas al desempeño laboral en un puesto específico. Por eso, estudias, realizas cursos y, mediante la formación, alcanzas mayores capacidades.
Pero esto no es todo lo que puedes necesitar en unas oposiciones, y es que las habilidades blandas o softskills te van a ayudar tanto a conseguir tu plaza como a desarrollar óptimamente tu trabajo, una vez obtenido el puesto en Correos. Te lo contamos todo aquí.
¿Qué es una softskill?
Softskills o habilidades blandas son las características de una persona que hacen que sea competente en determinados ámbitos. Se trata de cualidades que se valoran notablemente en los puestos de trabajo, ya que hacen que dos candidatos con mismo currículum se desempeñen de dos maneras muy diferentes. Por ejemplo, uno de ellos puede ser más comunicativo, tener más empatía y ser más propenso a trabajar en equipo.
En el desempeño de tu trabajo en Correos, esto será apreciado cuando ya hayas obtenido tu plaza. Puedes pensar que, si solo te sirve cuando ya has conseguido tu plaza, esto no te interesa. Sin embargo, ten en cuenta que contribuirá a que el trabajo fluya mejor, rinda por encima de lo esperado y haya buen ambiente.
Softskills en las oposiciones
En cualquier caso, seguro que te interesa poder aplicarlas para aprobar las oposiciones y eso vamos a explicarte aquí. El catálogo de habilidades blandas que pueden servirte para alcanzar tu objetivo es muy amplio. Algunas de ellas son la capacidad de atención, la curiosidad, el interés, la coherencia, la confianza, la autonomía, la empatía, la creatividad… Estas y otras pueden marcar la diferencia entre un opositor y otro. Te acercamos a algunas que son claves y deberías trabajar para fortalecerlas.
- Motivación intrínseca: esta habilidad es básica, pues sin ella no es fácil resistir todo el proceso de oposición, con sus subidas y bajadas.
- Autocontrol: esta habilidad te permite poder gestionar momentos en los que la presión por el examen se hace patente. Sin ella, las emociones podrían desbordarte y afectar a tu capacidad de estudio, concentración, etc.
- Flexibilidad: vas a encontrarte con imprevistos y obstáculos para los que no estarás preparado. La flexibilidad te permitirá que estos no te afecten. Podrán alterar tu rutina de estudio, pero lo harán durante el menor tiempo posible y de la manera menos invalidante posible. Por ejemplo, si enfermas, en vez de comportarte de manera catastrofista, la flexibilidad te facilitará que puedas darte tiempo para descansar o bajar el ritmo de estudio y reestructurar tu planificación. De no ser flexible, no sabrías cómo encarar la situación, te sentirías culpable, enfadado e incapaz de alcanzar tu ritmo de nuevo, por ejemplo.
- Enfoque en los objetivos: esta habilidad te permite no desencaminarte en el proceso de estudio de tus oposiciones. Es la que consigue que tus esfuerzos no se diluyan en distintas tareas, sino que se orienten solamente a tu objetivo. Te permite diseñar una estrategia de estudio adecuada.
- Pensamiento crítico: gracias a esta habilidad, al estudiar te planteas los contenidos de manera distinta, algo que favorece que los memorices de cara al examen. Además, te permite reconocer el contenido expresado de manera muy diferente a la estudiada.
- Proactividad: es una softskill que te hace ser dinámico, constructivo, tener iniciativa y predisposición. Como resultado, puedes anticiparte a las dificultades y, cuando se presentan, las conviertes en oportunidades.
- Gestión del tiempo: esta softskill es básica para tu planificación de estudio y el cumplimiento de la misma. Sin ella, te resultará complicado llegar al objetivo.
Hay personas que tienen estas softskills de manera innata o que las fueron aprendiendo a lo largo de su vida, pero siempre pueden mejorarse si sientes que alguna no es tu fuerte. ¡Te hará más apto para superar el proceso de oposición!